jueves, 1 de noviembre de 2012


Ø  LOS COMPLICES EN LA MALA EDUCACIÓN EN LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS

El sistema escolar y educativo panameño ha fracasado evidente en los últimos años. No hay ya manera de seguir disimulando: la culpa ni es de los padres, ni de los maestros, ni de los alumnos, ni de la sociedad. O cambia el sistema educativo o nos hundimos todavía más.
Panamá es uno de los países de América con peores resultados en fracaso escolar e inserción laboral juvenil. Lo han publicado la UNESCO, la CEPAL, en sus informes. Ya no hay donde esconderse de esta realidad, somos uno de los peores países para aprender de América.
Los jóvenes, educadores, familias y sociedad son víctimas de un sistema educativo mal diseñado, obsoleto, variable, ideologizado y absurdo que es responsable posiblemente de la incapacidad de Panamá de afrontar la crisis y que tiene unos resultados vergonzosos: altas tasas de fracaso y deserción escolar.
Entregas a tu hijo, un pequeño brillante y curioso al sistema y tienes muchas posibilidades de que, pasados los años, te lo devuelvan sin futuro y posiblemente sin un título. Escolarizar en un mal sistema no es una elección, no es una decisión libre.
Lo que debería cambiar en el sistema educativo panameño:
Facilitar el homeschooling (educación en el hogar), dar mayor libertad a los padres y cooperativas para crear centros educativos con pedagogías alternativas, reforzar a los docentes dándoles más autonomía, más tutorías al igual que en los colegios.
Apostar por la creatividad y el aprendizaje vivencial y significativo, eliminar la memorización y los exámenes, flexibilizar el currículum, reducir radicalmente las ratios en vez de aumentarlas y dar un verdadero impulso a la educación emocional, la personalización y la atención a las necesidades individuales.
Hay que abandonar el sistema educativo anacrónico, como, dejar de diseñar escuelas que matan la creatividad y también dejar de aplastar la curiosidad de los niños.
Los errores del sistema educativo panameño: Secundaria, Primaria e Infantil:
Y es que los errores no son únicamente de la Educación Secundaria, que los tiene. Es frecuente escuchar a docentes y padres que se encuentran sin solución, que los niños llegan sin amor al aprendizaje, sin más preocupación que aprender de memoria, sin capacidad de crear o de pensar críticamente, e incluso como analfabetos funcionales.

Ø  LOS INTERESES EN LA MALA EDUCACIÓN EN LAS INTITUCIONES EDUCATIVAS:

Como sabemos el lucro es una realidad latente en la educación, sólo “hay que quitar la venda de los ojos”. Algo que contribuye con La Mala Educación en nuestro país, es la educación con fines de lucro, que es inaceptable porque lleva a la segmentación y que no es ninguna novedad que las fundaciones educacionales usen maneras turbias para retirar las utilidades. Un ejemplo, “es como si hoy nos enteráramos que detrás del Hogar de Cristo existe una persona jurídica llamada Jesús y Cía. que retira sus utilidades”.

En Panamá se sabe que existen muchos colegios particulares (privados) y universidades privadas que funcionan con fines de lucro. Lo importante es que la educación con fines de lucro termina convirtiendo a la educación en un mercado segmentado, donde su proveedor decide qué tipo de educación entrega según los dividendos que busca conseguir.

Lo que ocurre hoy es que en las escuelas o en el sistema educativo, lo que le va a interesar es proveer la calidad de la educación que corresponda al segmento en el que está ubicada y que le permita retirar utilidades. No tiene otro fin, esto se refiere a los verdaderos inaplicados en la mala educación, que anteponen sus intereses o de su cúpula, como lo son los políticos, ministros en turno y grupo empresarial implicado en la educación ya sea como proveedor de insumos ó dueños de escuelas.


1 comentario:

  1. Bien, muy bien José; en verdad hay que hecer un reingenería en la educación panameña y un compromiso serio de parte de quienes les corresponden educar.

    ResponderEliminar